El tomate pera presenta una forma ovalada de porte mediano, con diferencias de tamaño según las diferentes variedades. Su carne es dura pero se ablanda con la maduración y su piel es fina. Es un tomate carnoso con menor cantidad de humedad interna. En el peciolo presenta un punto de ruptura. Esto permite separar el fruto de la planta con facilidad cuando está maduro.
Hojas sencillas, pecioladas y de limbo hendido. La parte verde de la planta tiene pelos glandulares que al rozarse emiten un liquido con olor característico. Las flores aparecen en racimos siendo el número de estas variables. El tomate pera es una baya carnosa, verde al inicio y rojo intenso cuando madura. Constituye un alimento bajo en hidratos de carbono pero rico en vitaminas y sales minerales.